HÁBITAT:
Carácter:
Gato plácido, tranquilo, flemático, sedentario, que
puede vivir felizmente en un apartamento. Sociable, pacífico, nunca agresivo,
dulce y muy afectuoso. Manifiesta un gran apego por su amo. Vive perfectamente
con sus congéneres, con perros y ninos. Se muestra distante con los extranos.
Para su equilibrio necesita una vida tranquila. Soporta la soledad. Sus
maullidos son poco frecuentes y discretos.
Consejos:
El mantenimiento del pelaje (lavado, peinado y
cepillado) es trabajoso. La longitud de su pelaje favorece la formación de
nudos, por lo que es necesario desenredar el pelaje todos los días. La muda se
produce durante la primavera y el verano. Los ojos lagrimean frecuentemente,
por lo que es preciso limpiarlos con regularidad (a diario).
Aplicaciones:
Ideal para vivir en un piso o apartamento pero requiere
cuidados de mantenimiento constantes.
ALIMENTACIÓN:
El régimen alimenticio debe ser equilibrado y muy
variado, sin exagerar las cantidades. Debido a su estructura maciza, los gatos
persas tienden a engordar con facilidad, lo que puede acarrearles problemas cardíacos.
Durante su primer año de vida es aconsejable proporcionarle al gato
determinadas vitaminas. Consúltalo con tu veterinario.
Los que han elegido a la raza persa como mascota deben
estar preparados igualmente para dedicarle muchas horas a la higiene del gato,
sobre todo al de su pelaje.
Éste debe ser cepillado todos los días con un peine
de cedras duras para evitar la formación de nudos. Debemos prestar especial
atención al pelo de la cola porque ésta se convierte fácilmente en un nido de
pulgas.
Esta operación es vital para evitar que el gato en su
higiene propia diaria trague demasiados pelos que acabarían formando bolas en
el estomago y provocando problemas intestinales y respiratorios.
Los ojos de esta raza también requieren de una atención
especial.
Éstos necesitan de una limpieza regular ya que los persas son gatos
que lagrimean mucho debido a la forma de su nariz. Nunca uses algodón para este
procedimiento. Lo mejor es usar toallitas impregnadas en una solución especial
para sus ojos (consulta a tu veterinario) y retirar con ellas las lágrimas
sobrantes.
Para esta operación no aprietes o insistas en el borde
de sus párpados, porque esto solo haría que irritar aún más los ojos del
animal. Pasa la toallita suavemente por la zona haciendo que tu gatito cierre
los ojos. Hazlo suave y dulcemente sin presionar en la zona.
Éstas son las atenciones especiales que necesitan los
gatos persas. Además de esas, por supuesto necesitan de otros cuidados, pero
éstos son generales para todos los gatos.
la nota de su blog es 5.0, esta muy completo
ResponderEliminarMuchisimas Gracias se hace lo mejor que se puede; y gracias a usted por todo :D
Eliminaresta lindo aunque los gatos no me gustan
ResponderEliminarjejeje :D
Eliminartu blog es muy vacano felicitaciones :)
ResponderEliminarGracias Señor Alex Toro; :D
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